Buscando cambiar el concepto tradicional de sistema operativo,
Microsoft decidió dar un salto evolutivo con el Windows 8. La duda de
todo aquel que compró una notebook en los últimos meses es dónde está el
botón de inicio, cómo se cierran las ventanas o adónde fue a parar el
escritorio.
Una de las particularidades de este sistema operativo
es que está preparado para responder al tacto (si se lo utiliza con una
tableta o un celular), al teclado y mouse o una combinación entre estas
dos opciones.
Para aclarar el panorama y facilitar cualquier
maniobra, Gabriel Gordon, Director de Windows, explica que “el mayor
secreto está en los bordes de la pantalla.
El menú de comandos se oculta en la parte derecha, a la cual se accede apoyando el cursor del ratón sobre este margen o pulsando las teclas Windows+C”.
Desde
esta barra de herramientas, llamada también Charm Bar, se ejecutan las
principales tareas de este entorno. Los cinco elementos son: Buscar, Compartir, Inicio, Dispositivo y Configuración .
La función Buscar
está integrada con el sistema y sin dejar la pantalla de Inicio se
puede rastrear en la aplicación que uno está usando o en las que están
instaladas, en los mensajes de correo, en Internet o realizar una
búsqueda en profundidad en todo el equipo.
Desde Compartir se pueden mandar fotos, textos o cualquier otro archivo a los contactos de las redes sociales o del correo electrónico.
En Inicio
se agrupan las aplicaciones que se muestran en los mosaicos activos.
Entre otras opciones se puede regular el tamaño y el color de los
paneles, y anclar carpetas, accesos directo o aplicaciones al menú de
Inicio. Tras uno de estos bloques está el acceso al Escritorio . Además de agregar, uno puede borrar aquellas que ya no se necesitan.
En Dispositivos
se puede mandar a imprimir documentos o páginas, saber si el USB o
cualquier otro dispositivo está conectado y sincronizar información con
el teléfono.
Configuración es similar al viejo Panel de Control.
En este sector aparecen los ajustes más comunes de la PC como volumen,
brillo, resolución, modificar la imagen de la cuenta o el fondo y color
de la pantalla de Inicio. También, se puede apagar, reiniciar o hibernar
el sistema.
Desde Configuración también se ingresa a la
Microsoft Account, lo que antes era el Windows Live. “Su función es
concentrar todas las bandejas de entrada en una aplicación. Se le pueden
vincular las cuentas de todas las redes sociales, Skype, de e-mail,
para no tener que hacerlo cada vez que se inicia sesión”, aclara Gordon.
Como
los íconos de cerrar y abrir las ventanas desaparecieron, para ocultar
una ventana en una pantalla táctil habrá que tomar el borde superior y
arrojarla hacia abajo. Esto mismo ejercicio se puede cumplir con el
mouse o pulsando las teclas ALT F4.
El bloque de los azulejos,
siguiendo con la mecánica de los teléfonos inteligentes, se puede
desplazar de izquierda a derecha y ocupar varias pantallas. Para
minimizarlo, basta con pulsar el lateral inferior de la pantalla. Para
volverlo a su posición original, hay que hacer clic en cualquier parte
de la pantalla.
El tradicional Escritorio , pieza
fundamental de otras versiones, perdió protagonismo y además de ser una
ventana más, no tiene el botón de inicio. Para aquellos que quieran
volver al pasado, existen algunos programas que instalan estas
comodidades. Botón Inicio 8 (www.startbutton8.com/es) y Start 8
(www.stardock.com/products/start8) son dos alternativas.(Tomado de la web: Clarin )
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